miércoles, 14 de febrero de 2007

p - 72


Debe ser un regalo del cielo
Al verme cualquiera diría que estoy loca
Estoy sola en mi alcoba…con tu recuerdo
Escuchando al cielo llorar de alegría
(Por que estoy inmensa alegre)
No sé dónde estas y te extraño
Más a pesar de este suplicio
La ufanía de quererte me extasía
Me hunde en un sueño efímero y duradero
Donde la esperanza consolida sentimientos
En tanto la nítida lluvia
Enjuaga mi rostro, yo también lloró
Me embeleso en tu recuerdo,
Y me vuelvo amante de la melancolía
Me desprendo de mi misma y me saturo de ti
Dios en su infinita bondad me regalo este día
Distante de ti para ser tuya
Embriagada de ti para no poseerte
Y así, en medio de mi aflicción
Despierta en mí la viva esperanza…
Que Dios vera mi agonía
Y como mi Padre me entregara en tus brazos
Y si mi esperanza es hueca Dios me ha dado vigor
Para no vivir a tu lado
En la vasta ufanía de saber que te amo.

1 comentario:

isaac dijo...

me gusta mucho la descripción que haces con respecto a los sentimientos que afloran gracias a (o a pesar de) la distancia entre dos personas...

sin embargo me parece muy extraño encontrar, en alguna realidad planteada por ti, la presencia de Dios, además que lo describes como un ente indiferente que decide los destinos de las personas...

no puedo negar, sin embargo, que me pareció fascinante la forma en que lo incorporas al texto...

espero que estés muy bien

besos y abrazos